Gustavo Gutiérrez II
12. (03/6) Teología Latinoamericana I (Cont.)
Gutiérrez, pp.193-241.
posted by Metodos Teologicos @ 11:43 AM
Tuesday, June 03, 2008
Gutiérrez, pp.193-241.
Gutiérrez, pp.193-241.
Una página de los/las estudiantes de la materia Métodos Teológicos, I.U. ISEDET, Buenos Aires, Argentina (2008)
12. (03/6) Teología Latinoamericana I (Cont.)
posted by Metodos Teologicos @ 11:43 AM
1 Comments:
IU ISEDET.
Métodos teológicos.
Pro. Hansen.
Alumno: Gross Javier Oscar.
Lectura Gutiérrez pp. 193-291
La problemática en que nos sumerge el texto de la clase de hoy, es la relación entre, la salvación y la liberación a lo largo de la historia.
Para ello es preciso poder entender, que significa salvación, lo que para Gutiérrez es una gran carencia de la teología actual.
Cuando habla de la historia de la salvación hace enfoque en dos cuestiones: una salvación basada en una aspecto cuantitativo (salvación universal, tomado de Pablo en su carta a Timoteo). Pero que la salvación sea universal no implica, que todos puedan alcanzarla. Acá tenemos el enfoque cualitativo.
Gutiérrez establece una relación muy fuete entre creación y salvación, ya que la creación es para Gutiérrez el primer acto salvación. La salvación es liberación y es de por sí un acto político (éxodo).
En la página 209, la teología de Gutiérrez presenta aspectos demasiados antropológicos, ya que pone al hombre como centro del proceso activo de la liberación, de la salvación y le da un protagonismo demasiado fuerte, ya que el hombre con su trabajo es quien transforma la sociedad para que esta no sea alienable.
Otro aspecto al que le da importancia es al de la promesa escatológica, ya que Dios se revela a través de la historia, como lo hizo a lo largo de la alianza de la alianza, la promesa de la historia. Y otra vez vuelve a poner el acento en un proceso que es cuestionable, ya que se debe entender, que queremos decir cuando hablamos de historia, ya que claro para Gutiérrez la historia es el resultado de la acción de los hombres, pero hoy, que se habla del fin de la historia luego de la caída del muro de Berlín el 9 de Noviembre. La promesa tiene que ver con el Reino de Dios, pero que decir esto, cuando cada vez la sociedad es más injusta y genera asimetrías que han llevado a la consolidación del neoliberalismo es un poco complicado.
Tampoco comparto que la lucha de la justicia sea la lucha por el Reino de Dios, porque la justicia del hombre ha estado interpelada por razones personales que han llevado a ser las luchas de justicia injustas. Sino pensemos en los conflictos sociales que tenemos en la Argentina, con el enfrentamiento entre el campo y el gobierno, lucha que termina siendo injusta para el resto de la población que sufre por esto. Y otra pregunta que se entiende por lucha (desde la perspectiva de Gutiérrez.)
Otro aspecto que quiero discutir, es que el hombre no es señor de la creación como lo dice en la página 233, no, el hombre es siervo de la creación, creerse Señor ha hecho que se destruya la misma, no se lo ha planteado desde la mayordomía ( Leonardo Boff le dado un vuelta a esto).
La definición de pecado me parece interesante, en cuanto a pensar la estructuras de poder, a pensarlo socialmente, pero no se debe perder de visa el componente individual, ya que a mi modo de ver no poder superar el pecado en una primera instancia personal, nunca nos puede llevar a una instancia social, la teología de la liberación se pierde en el nosotros y se olvida del yo, los pentecostales en cambio se pierden en el yo y se olvidan del nosotros.
Para terminar y no ser tan extensos creo que el pecado es en una primera instancia liberación del hombre de lo que lo oprime, solo siendo conciente de aquello que nos oprime, se puede pensar a proyectar un mundo mejor, (reino de Dios), pero para eso es necesario una toma de conciencia personal, y un análisis mucho más complejo de la vida ya que la misma esta interpelada por muchos factores y no el político como hace hincapié la teología d e la liberación.
Creo que la teología de la liberación nos aporta un marco social y político interesante, pero no debemos caer en la trampa de un nuevo tiempo inmediato como estaban en boga en ese momento.
La teología de la liberación marco una bisagra en la teología latinoamericana, pero toda bisagra lleva a otro tiempo, y otros marcos teológicos que hoy son necesarios re-pensar desde la teología, para darle un vuelta de tuerca a una sociedad más compleja.
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